Como hacer buenas fotos macro de flores

Cómo fotografiar plantas y flores

Al estar ancladas en un punto, las flores son, en principio, más fáciles de fotografiar que los insectos, ya que nos permiten trabajar con calma, y hacer todas las mediciones, pruebas y composiciones que se nos ocurran. No obstante, presentan la dificultad de escoger el punto de enfoque adecuado. Para elegirlo analizaremos la composición en busca del elemento más llamativo o sobre el que queramos llamar la atención, aquel a donde se dirigirá primero la atención del observador.

Debemos evitar, no obstante, la monotonía. Si fotografiamos con frecuencia las flores con la misma óptica y desde el mismo punto de vista, nuestras fotos terminarán pareciendo todas iguales.

Técnica de macrofotografía de flores
Olympus EM-10; 60mm macro; f/4,5; 1/160. Fotografiadas desde arriba, este grupo de flores están casi en el mismo plano y aparecen enfocadas, mientras que el suelo del bosque permanece borroso.

Cuando salgamos al campo a fotografiar flores debemos escoger como modelos los mejores ejemplares y los que ofrezcan un entorno más adecuado. Básicamente podemos centrarnos en algún detalle o bien captarlas en su entorno. Si fotografiamos con vistas a su identificación debemos buscar una composición que permita ver, no sólo las flores, sino otras partes de la planta como las hojas. Para captar las plantas en su entorno son útiles los objetivos gran angular, mientras que si buscamos aislarlas será más útil un teleobjetivo que nos permita desenfocar el fondo.

Con frecuencia deberemos emplear aberturas de diafragma pequeñas si queremos lograr suficiente profundidad de campo para obtener una flor totalmente enfocada. Eso significa velocidades de obturación lentas y la necesidad de utilizar un trípode o bien aumentar la sensibilidad ISO si queremos que la imagen salga nítida. A esto hay que sumar la posibilidad de que una brisa agite las plantas y la flor nos salga movida.

Macro foto de flores blancas
Olympus E-M10; 60mm macro; f/7,1; 1/320s. Dada la imposibilidad de mantener todas las flores enfocadas, se enfocó sobre la que destaca más, que es la más elevada y que muestra los estambres amarillos.

Cuando las flores son muy grandes, un teleobjetivo de cerca puede no proporcionarnos la profundidad de campo que deseamos. En ese caso tendremos que alejarnos o emplear un objetivo de una distancia focal menor y posteriormente recortar la imagen.

Al fotografiar flores en sombra, los colores pueden salir fríos, en cuyo caso lo mejor es ajustar el balance de blancos manualmente con una carta gris o con ayuda de una cartulina blanca, o bien disparar en Raw y ajustarlo durante el postproceso.

Si la luz natural es insuficiente, podemos utilizar un flash desde una posición elevada imitando la luz del sol.