Accesorios para fotografía macro: Lentes de aumento, aro de inversión, teleconvertidor, tubos de extensión, fuelle.

Objetivos, lentes y accesorios para macrofotografía

Las lentes de aumento

También llamadas close-up, son una forma económica de aumentar la capacidad de acercamiento de nuestro objetivo.

Estas lentes se enroscan en el frontal del objetivo igual que cualquier filtro y permiten diversos aumentos en función de sus dioptrías (normalmente +1, +2, +3 y +4, aunque también podemos encontrar lentes de +10) al reducir la distancia mínima de enfoque de nuestro objetivo. Su precio se mueve en torno a los 25 €.

Al emplear dos lentes juntas deberemos colocar la más potente junto al objetivo. Si disponemos de un objetivo estándar y un teleobjetivo con diferentes diámetros de filtro, lo más apropiado será adquirir las lentes de aumento para el teleobjetivo. No suele ser adecuado emplear aberturas de diafragma mayores que f/8, ya que se suaviza mucho el enfoque.

Aros de inversión

Este accesorio permite grandes aumentos y es económico siempre que dispongamos de un objetivo adecuado.

Consiste en un anillo que por un lado lleva la montura de bayoneta de la cámara y por el otro se enrosca en la frontal del objetivo como cualquier filtro, de forma que lo que hacemos es colocar el objetivo invertido.

Permite aumentos notables, pero se pierden todos los automatismos de la cámara, por lo cual debemos trabajar completamente en manual. Los mejores resultados se obtienen con objetivos de 24 o 28 milímetros simétricos, es decir, que si los miramos por la parte frontal y la posterior el diafragma parece del mismo tamaño. El precio de los aros de inversión oscila en torno a los 30€.

Si no disponemos de objetivos gran angular de distancia focal fija, y queremos probar este sistema podemos adquirir uno de segunda mano y enfoque manual por muy poco dinero. Como lo vamos a montar invertido, da lo mismo aunque la montura de bayoneta no sea compatible con nuestra cámara y que sea AF o MF.

Tubos de extensión

Algo más caros que los anteriores, pero todavía bastante asequibles, los tubos de extensión son una buena alternativa para la fotografía macro.

Como su nombre indica, son tubos –no llevan lentes- de diferentes longitudes que normalmente se venden en grupos de tres. Logran mayores aumentos al separar el objetivo de la cámara. Podéis observar este efecto si separáis y acercáis el objetivo de vuestra réflex mientras observáis por el visor.

Se pueden utilizar de forma individual o combinados y producen una pérdida de luminosidad que se traduce en el empleo de velocidades de obturación más lentas.

Los podemos encontrar con o sin conexiones que mantengan la comunicación entre la cámara y el objetivo, lógicamente es mejor adquirir un juego de tubos con conexiones para no perder los automatismos.

Teleconvertidores o conversores

Los conversores o teleconvertidores parecen tubos de extensión, pero, al contrario que estos, incorporan varias lentes. Aumentan la distancia focal de nuestro objetivo, por ejemplo, un conversor de 1,4 transforma un objetivo de 200 milímetros en 280mm; uno de x2, en 400mm. logrando además un mayor aumento en la mínima distancia de enfoque. También se produce una pérdida de luminosidad de 1 o 2 diafragmas.

Antes de adquirir un conversor hemos de asegurarnos que de que nuestro objetivo los admite. Por ejemplo, Sigma fabrica dos conversores de 1,4x y 2x, pero al llevar lentes que sobresalen, no todos los objetivos de la marca son compatibles con ellos, ya que, sencillamente, las lentes chocan entre si y no es posible acoplar las bayonetas.

Fuelles

Los fuelles emplean el mismo principio que los tubos de extensión, es decir, separan el objetivo del cuerpo de la cámara para lograr mayores aumentos. Al lograr una mayor separación que con los tubos de extensión, los aumentos conseguidos también son más grandes, pero también la pérdida de luz.

Igual que con los tubos, con los fuelles podemos emplear cualquier objetivo, como un 50mm. estándar, un objetivo macro o incluso un objetivo invertido.

Podemos encontrar fuelles sencillos bastante económicos, pero siempre perderemos los contactos entre la cámara y el objetivo. Sólo Novoflex fabrica unos fuelles especiales con monturas Canon y Nikon que mantienen los automatismos al trabajar con ellos y lógicamente son más caros.

Los objetivos macro

Si te interesa la macrofotografía, antes o después terminarás adquiriendo un objetivo macro.

Podemos encontrar en el mercado objetivos zoom que se definen como “macro” aunque en realidad no lo son, puesto que los aumentos que ofrecen se quedan en torno a 1:4, 1:3, no obstante, son muy útiles para fotografía de primeros planos y para llenar el encuadre con sujetos que no sean excesivamente pequeños, por lo cual, si nos gusta este tipo de fotografía, no es mala idea adquirir como zoom estándar o como telezoom uno de estas características.

Macroobjetivo para fotografía macro
Un caso especial entre los objetivos macro es el canon MP-E 65, capaz de aumentar hasta 5 veces el tamaño real sin ningún accesorio.

Los objetivos angulares que permiten distancias de enfoque reducidas (de 30cm. o menos) también son muy interesantes para la fotografía de primeros planos en las que se incluya el entorno y nos interese una buena profundidad de campo y la perspectiva característica de estos objetivos. Son muy escasos los objetivos que reúnan estas características, pero este efecto es fácil de lograr con las cámaras compactas que ofrecen una capacidad macro en la posición más angular desde 1cm de distancia del objetivo.

Los objetivos macro auténticos ofrecen una ampliación de 1:1, es decir, el sujeto se plasma en el sensor a su tamaño real. No son baratos, pero antes o después terminaremos adquiriendo uno si realmente nos interesa esta disciplina, ya que son el accesorio más versátil y adecuado para la macrofotografía. Los podemos encontrar con distancias focales que van desde los 50mm hasta los 200mm o sus equivalentes en los distintos formatos (APS-C y Micro Cuatro Tercios).